Terremoto
Por J. M. Arrivillaga
La tierra tembló. Terremoto. Salió, atravesó la calle y tropezó. Cayó y en ese instante comprendió que un milagro había ocurrido: el temblor lo hizo pararse de la silla de rudas y olvidar que llevaba quince años sin caminar.
Jajajaja que casaca!!! Sin duda una historia con una final feliz. Esa se aplica a la frase de "No hay mal que por bien no venga".
ResponderEliminardespues de leer el último de Quique me di cuenta que mi cuento aún pudo quedar así:
ResponderEliminarLa tierra tembló. Salió, atravesó la calle y tropezó. Cayó y comprendió el milagro: el temblor lo hizo pararse de la silla de ruedas y caminar.
Muy bueno, me gusta mucho porque en breve describiste 15 años. Me gusta. Debes de poner atenciòn a los dedazos, porque ya en varios cuentos he visto que se te va mas de una letra en alguna palabra. Como me aconsejò Lucìa, lèelo en voz alta y ahi es donde te das cuenta de esas cosas. Para mì en lo personal, es el mejor consejo que me han dado.
ResponderEliminarSalu
Me gusta, Juanmi, me gusta el humor en un cuento tan corto. Creo que lo que cambiaste luego en tu comentario estaría mejor, porque estaba leyendo en el decálogo de los microcuentos que el título forma una parte fundamental de la historia, es decir, explica o añade información.
ResponderEliminar